Hoy en día, se reconoce que la incorporación de nuevas tecnologías está transformando el modelo de negocio del sector ferroviario. No solo se trata de mejorar costes, funcionalidades o servicios, sino que se está transformando la cadena de valor del entorno ferroviario, optimizando y creando nuevos servicios que impactan positivamente a fabricantes, operadores, gestores y pasajeros.

Las herramientas tecnológicas actuales permiten monitorizar en tiempo real el comportamiento de todos los sistemas que equipan el tren, incluso de toda la flota en operación, capturando miles de datos que se analizan para realizar diagnósticos descriptivos y predictivos, y generar alarmas para actuaciones inmediatas.

Este conocimiento sobre el estado y funcionamiento de los sistemas permite realizar diagnósticos optimizados y anticipar posibles fallos, aumentando la disponibilidad de las unidades y reduciendo los costes de mantenimiento.

La mejora de la conectividad es fundamental para que la información generada sea efectivamente utilizada. Con la implementación de redes 5G, se han establecido líneas de actuación para su despliegue inmediato y adecuación a diferentes escenarios, incluido el ferroviario. Desde 2016, las autoridades europeas han destacado la necesidad de una acción coordinada para el despliegue de esta tecnología, involucrando tanto al sector público como privado, para que el 5G sea accesible para todos los ciudadanos.

Este es un reto inaplazable, ya que solo una conectividad de última generación permitirá explotar completamente las potencialidades que la transformación digital puede ofrecer al sector ferroviario, llevándonos del tren analógico al digital y totalmente conectado.